Lina Bo Bardi es seguramente la arquitecta contemporánea brasileña más reconocida e influyente, con sus emblemáticos edificios de arquitectura, muebles, exposiciones y teorías sobre arquitectura y diseño.
La arquitecta brasileña de origen italiano Lina Bo Bardi (criada y educada en Italia), jugó un papel importante en el desarrollo de la arquitectura moderna en Brasil. Desarrolló una aproximación al diseño único, consiguió resaltar la condión social de la construcción y sus raíces culturales en el seno de la arquitectura. Al esforzarse por crear una ‘povera architettura’, Lina Bo Bardi puede ser vista como una precursora de las emergentes agrupaciones sociales que impulsan la «arquitectura de ocupación». Uno de sus logros más importantes fue su capacidad para crear edificios que eran muy populares entre el público local y que desafiaron la clasificación convencional. La breve serie de obras que llegó a realizar laboriosamente en Brasil se ha convertido en referente internacional muy admirado y de vigente actualidad, por su búsqueda de una arquitectura humana, sencilla y popular.
En 1950, ya viviendo en San Pablo, proyecta y realiza su propia casa, la Casa de Vidrio, y en 1957 inicia el proyecto y construcción del MASP (Museo de Arte de São Paulo), que se inauguró en 1968; una obra radicalmente moderna, con una gigantesca estructura porticada y salas de planta libre, llenas de luz natural.
En 1963 realiza la reforma de una antigua cárcel, transformándola en un espacio de cultura y arte popular, la Casa de la Cultura de Pernambuco.
Al final de la década de 1970 realiza una de sus obras mas paradigmáticas, el edificio SESC – Pompéia, que se tornó una fuerte referencia para a historia de la arquitectura en la segunda mitad del siglo XX. En este proyecto Lina Bo Bardi aprovechó las preexistencias de una fábrica de bidones, respetando la estructura horizontal de los galpones existentes, potenciando el espacio libre de las calles interiores, y situando una nueva doble torre vertical de hormigón visto, como contrapunto.
Si rastreamos el arco completo de su carrera, su aporte a la teoría de la arquitectura fue clave con el texto Contribuição Propedeutica ao ensino da Teoria da arquitetura (1957), un alegato humanista en defensa de una arquitectura culta y ecológica, basada en los avances técnicos. Por otro lado dejó cientos de bocetos y diseños de colorido único y de gran humor. Estos dibujos fueron su principal instrumento para expresar su singular estilo de conceptualización arquitectónica y planificación. Su importantísima contribución a la arquitectura y al diseño se completan con el desarrollo de una línea de mobiliario, que podemos encontrar acompañando su obra, como la Bowl chair. También incursionó en el diseño de joyas y conformó a lo largo de su vida una de las colecciones más impresionantes de arte popular brasilero.
Lina Bo Bardi hubiera cumplido 101 años el 5 de diciembre pasado. Aquí nuestro pequeño homenaje.