#CASAFOA2023. Entre el fuego sagrado y la sustentabilidad
Una nueva edición de Casa Foa convoca este año a transitar entre espacios que fluyen armoniosamente uno tras otro y muestran una gran variedad de diseño de interiores con muchas reflexiones puestas en juego.
Desde diseños producto de claras y contundentes ideas de partido hasta inspiraciones regionales y el ya distintivo sello de la sustentabilidad presente en varios de los espacios, buscando aplicar las nuevas tecnologías al desarrollo de los ambientes para lograr cada vez mejores condiciones ambientales.
El Espacio N°5, Cocina de encuentro by Johnson acero de María Delia Zaccagnini muestra como la inspiración en la antigüedad clásica es siempre es una opción, produciendo un espacio que reinterpreta la geometría imperante en el meticuloso diseño del teatro griego, trasladando la idea a la cocina, como escenario del noble acto cotidiano de la preparación de los alimentos para su ingesta. Allí, el fuego se ubica en el centro geométrico de la composición para inspirar a los atónitos espectadores del maravillo espectáculo visual de la propuesta espacial con pinceladas azulinas aplicadas con una excelsa maestría.
El fuego central cede su lugar a la vida en el Espacio N° 12, Hall central del arquitecto Julio Oropel y el diseñador Jose Luiz Zacarias Otiñano, espacio pensado para la contemplación y donde el nombre nos dice todo, «Reino fungi | Granja urbana». La composición, que actualiza el hall existente del edificio -de una marcada arquitectura racionalista con un óculo como claro protagonista- descansa nuevamente en una rigurosa geometría concéntrica. Así, resalta una columna vertebral central al que confluyen rayos materializados por tiras de 100 taburetes de hormigón blanco con morfología fungí. En el centro, el espectáculo de la vida nos sorprende, contenida por una estructura aérea circular crecen las gírgolas y especies de hongos Black Pearl, Girgolas doradas y rosadas, Pioppino Ganoderma Lucidum en un ambiente controlado de luz y humedad.
La tangibilidad de los mobiliarios se abre paso por sobre la naturaleza y desarrolla espacialidades que descansan en un mundo post-pandémico, en la sustentabilidad y en inspiraciones norteñas. Éstas se observan en el Espacio N° 30 «Habitar exterior», espacio compuesto por una sucesión de espacios que comienza con una Open Office de Oficia Workplaces, continúa con un paisajismo de Lucas Albero para rematar en el Quincho de Germán Jimenez, donde la materialidad y la paleta de colores refuerza la inspiración en el NOA, todo bajo la consultoría de Pia Magri. Allí, se nos proponen espacios de trabajo al aire libre así como espacios para el ocio y la distensión articulados por una materialidad donde se destacan los tecnotubulares de Tecnoperfiles, un producto de PVC muy versátil aplicado en este caso como quiebravistas o parasoles y que aportan una solución estética que permite tamizar el acceso de luz al espacio interior. Además de ello, la gran protagonista de este espacio es la abertura sustentable de PVC más grande del mercado, una ventana de la línea evolution de Tecnoperfiles que alcanza a los 3,60 metros de alto y 4 metros de ancho sin por ello perder hermeticidad o facilidad de accionamiento.
La sustentabilidad continúa siendo protagonista de otros espacios, como el Espacio N° 32, Coworking de María Beatriz González Zuelgaray y Bea Palacio, donde se cerró el vano originalmente dedicado a la práctica de tiro con carpinterías eficientes térmicamente de la línea efficient de Tecnoperfiles, con puertas que conectan con exteriores y aberturas en color gris grafito que permiten el ingreso de luz natural, esencial en un espacio de trabajo continuo.
Quizás dentro de todos los espacios que muestran lugares para el descanso, el Espacio Nº 23, Dormitorio con vestidor a cargo del estudio Scatola Nera conjuntamente con el Estudio Cristela Caviglia es el que muestra la mejor relación con el circuito propuesto para la muestra. Su partido, que pretende materializar una diagonal para agilizar la circulación de un extremo al otro separa por intermedio de un plano de vidrio de paño fijo transversal, dos universos bien diferenciados. Allí, se puede encontrar un vestidor que reponde más al universo culturalmente relacionado con lo femenino y un dormitorio que responde al imaginario masculino. Separados pero unidos visualmente por este límite virtual, el perfectamente geométrico arco de medio punto sorprende por ejecución y la continuidad que se genera.
Los espacios sorprenden uno tras otro en Casa Foa de este año, que se emplaza en un edificio declarado monumento Histórico Nacional en el año 2005. Se trata del Tiro Federal Argentino, obra arquitectónica de 1937, que sirve de contenedor de las nuevas propuestas que invitan a imaginar y disfrutar de los espacios del habitar cotidiano reversionados en clave del presente y del futuro.