En Septiembre los miembros del jurado evaluaron y eligieron los cuatro premios, uno por Categoría y las Menciones de honor sin orden de mérito. Apelando a la consigna del concurso centrada en la innovación se seleccionaron proyectos que buscaran respuestas de triple impacto dando soluciones con valor económico que incluyan además a la variable conciencia social como eje de la propuesta, al tiempo que da una respuesta satisfactoria desde el Diseño y la Sustentabilidad.
El Premio a la Innovación en el Hábitat Sostenible, se entregó el pasado martes 9 de octubre, en Fundación PROA, para cuatro categorías en el contexto de la Semana del Diseño de la Ciudad de Buenos Aires, bajo el lema Habitá el futuro! Se llevó a cabo un happening de experiencias dedicado a la innovación, nuevas tendencias y tecnologías para la vivienda.
Se premiaron ideas, diseños, desarrollos y acciones innovadoras en relación al hábitat sostenible que se estén gestando en nuestro país y que promueven un cambio profundo en las problemáticas urbano-habitacionales.
A continuación, te mostramos a los Premios DOMUS LAB de cada categoría:
Premio DOMUS LAB a la Innovación en el hábitat sostenible
Categoría Empresas.
Fue para Lucas Recalde, Victoria Paez Molina y Julio Federico Brunas, por su proyecto 3 Construcciones, quienes contaron con la colaboración de Mónica Buthet, María Victoria Ferraro, María Constanza Agüero y Juan Pablo Cmet. La empresa de triple impacto obtuvo el premio por su sistema constructivo basado en la reutilización del PET.
“Como profesionales de la construcción y agentes activos y conscientes de que vivimos un momento crucial para nuestro medio ambiente creemos que la lucha contra el calentamiento global y el cambio climático, deben convertirse en una preocupación y ocupación de todos los sectores productivos. La suma de ambos escenarios, nos lleva al diseño de un prototipo de vivienda sustentable y de bajo costo, que al mismo tiempo acerca la posibilidad de una vivienda digna a aquellas personas que quieren construir un hogar. Generamos un producto innovador que, durante su etapa de fabricación, consume niveles bajísimos de energía y no requiere el empleo de agua, disminuyendo a su vez la basura mediante la reutilización de botellas PET y otros plásticos. Mediante la aplicación de este sistema se generan también puestos de trabajo en comunidades vulnerables de nuestra sociedad disminuyendo así los costos de construcción.”
El Premio fue entregado por el Señor Fabián Larobina, Gerente de Marketing de la empresa IPS, Global Sponsor del Premio Domus Lab.
Premio DOMUS LAB a la Innovación en el hábitat sostenible
Categoría Estudiantes
El Premio fue para los arquitectos cordobeses Tomás Gulle, Ariel Matías Álvarez Cueto y Rodrigo Carnero Vidal por su trabajo final de carrera que reinterpreta las necesidades habitativas de los wichis.
“Los modos de habitar en las comunidades Wichí por su condición de precariedad expresan el temor a la desterritorialización viviendo al margen de las condiciones de salubridad y al ser insalubre las respuestas que les da el hábitat atenta contra la calidad de vida.En el marco de este contexto y con la intención de realizar un proyecto que amplié los límites del ámbito académico y que impacte en una realidad concreta surge nuestro trabajo de Tesis de Grado el cual aborda problemáticas de las comunidades Wichís del Chaco Salteño argentino. El foco de estudio son las comunidades y su progresiva disolución, junto a la ausencia de infraestructura y déficit habitacional. El objetivo del proyecto es, mediante la vivienda como instrumento, promover un plan de acción que apunte al desarrollo integral de las comunidades.”
Entregó el Premio el Ingeniero Santiago Lesser, Gerente de Construcción de Ternium, Global Sponsor del Premio Domus Lab.
Premio DOMUS LAB a la Innovación en el hábitat sostenible
Categoría Investigadores
En esta categoría el proyecto premiado fue “PAAF!!”, Programa Académico de Asistencia Federal, cuyo equipo autor está integrado por reconocidos arquitectos: Alejandro Borrachia, Carlos Salaberry, Jorge Barroso, Pablo Itzcovich, Fernando Pini, Alejandro Lowus, Alejandro Albistur, Gabriel Sottile, Agustín Moscato, Fernando Robles, Gastón Budín, Sebastian Cecchetti, Vanesa Franco Gómez .
“La UM FADAU, como muchas otras escuelas de arquitectura cierra su ciclo de estudios con la entrega de un Proyecto Final Integrador (PFI); La diferencia sustancial tal vez radica en el fuerte componente social que como lineamiento posee la facultad toda y que principalmente se manifiesta en la cátedra fundada por su anterior decano y precursor de estos temas, el arquitecto Oscar Borrachia, junto a los arquitectos Carlos Sallaberry y Jorge Barroso; Y seguramente en que cada alumno se recibe de arquitecto proyectando, gestionando y construyendo un edificio en pleno funcionamiento que se dona a una comunidad necesitada de nuestro país Durante el año 2016, la cátedra de PFI, propuso a sus alumnos cursantes, construir un módulo habitable en escala real destinado a familias y comunidades marginadas, buscando candidatos en todo nuestro país. Hoy, después de dos años de trabajo los resultados de esa iniciativa se multiplican exponencialmente.
El primer grupo de alumnos en finalizar este trabajo viajó a la provincia de Santiago del Estero, en el Noroeste de la Argentina, y construyó un módulo habitable y flexible de tecnología en madera, chapa y adobe, que responde a las condiciones del clima y a la identidad cultural de esa región.”
El Ingeniero Daniel Cwirenbaum, Presidente de Grupo A2, fue el encargado de entregar el Premio para el equipo encabezado por el Arquitecto Alejandro Borrachia.
Premio DOMUS LAB a la Innovación en el hábitat sostenible
Categoría Profesionales
El premio fue para la obra Casa-Estudio Refugio Urbano de los arquitectos cordobeses Agustín Berzero y Valeria Jarós, los cuales no pudieron asistir a la ceremonia, ya que se encuentran cursando una maestría en el exterior.
“Sobre el área peri central y ligado al Arroyo La Cañada se ubica el terreno de 9x16m con el fin de resolver un pequeño refugio urbano en un planteo mixturado “casa-trabajo”. El proyecto parte de una estructura espacial existente que prácticamente cubría la totalidad del terreno. A partir de la acción de comenzar a socavar la masa se definen los patios que estructuran el planteo. La propuesta se materializa con 2 lógicas constructivas. Se resuelve el nivel inferior en construcción tradicional dotando de estructura la pre-existencia al incorporar 2 vigas de hormigón armado visto que reciben las cargas de la caja superior resuelta en vía seca. Todo el perímetro del terreno se materializa con el vulgar “ladrillo cerámico” el cual se corta en 3 partes con el fin de optimizar el material y componer una envolvente cribada de 8m de altura que define la expresión de la propuesta, resuelve las condiciones de seguridad y construye en su interior una atmósfera espacial de gran calidad.”