La confusión de roles profesionales en la arquitectura

La confusión de roles profesionales en la arquitectura

por  Agustín García Puga, arq.

La confusión de roles en nuestra sociedad parece ser una constante en estos tiempos.
Podemos ver personas que trabajan y ocupan lugares sin tener la preparación y
conocimientos adecuados para las tareas que desempeñan. Un claro ejemplo es el de
las estrellas del espectáculo o figuras mediáticas que ocupan cargos públicos e
ingresan en el mundo de la política. En lo que se refiere a la construcción, cualquier
individuo, sin importar su profesión o nivel socioeconómico, construye y “dirige” obras, o
las delega en albañiles autocalificados como “responsables y serios”, sin contratar
profesionales y empresas que garanticen la idoneidad y calidad de un trabajo acorde a
las normativas de los códigos y a las reglas del arte.
La situación afecta a la mayoría de los profesionales y empresas, que cada día tienen
más dificultades para afrontar los costos fijos e impuestos de su infraestructura de
trabajo, y que ven minadas sus posibilidades laborales por quienes recurren a prácticas
no establecidas ni contempladas en la ley.
Hacen falta extensas campañas de educación y publicidad -hasta hoy poco visibles- que
reviertan nuestra falta de inserción e imagen en la sociedad por parte de las entidades
de nuestra actividad.
Es curioso observar cómo la arquitectura no genera en quienes hacen una consulta o
encargan algún proyecto, la obligación de pagar honorarios al profesional. Es muy
diferente cuando se recurre a los servicios de abogados, médicos, psicólogos,
escribanos, consultores, etc., que cobran la consulta antes de iniciar su trabajo. Es
evidente que hay un problema de base que genera esta dificultad en los arquitectos
para defender los honorarios que les corresponden. La universidad no contribuye en su
proceso de formación académica a enseñar y estimular cuestiones vinculadas a las
gestiones económicas.

La realidad indica que la gente no tiene real conocimiento de cuáles son las
pautas que deben tenerse en cuenta para iniciar una construcción, cuáles
son los riesgos asumidos, qué tipo de tarea debe desarrollar un
profesional, por qué es necesario y qué exigirle.

El estado municipal tiene también una gran responsabilidad en las formas del ejercicio
profesional de los arquitectos a través de las regulaciones normativas que impone con
el código de edificación. La creación de figuras nuevas como roles profesionales en la
propuesta del nuevo código de edificación, ya en su etapa final de aprobación, configura
errores conceptuales y de índole legal notables ya que estas figuras no se comparecen
con lo prescripto en el nuevo código civil y comercial aprobado hace muy pocos años.
El “Revisor de Proyecto”, “El Gerenciador” y el “Director General de Proyecto” son
figuras inventadas que no guardan correlato con las leyes del código civil y comercial, lo
cual genera una confusión que no ayuda a los arquitectos ante una instancia judicial,
contribuyendo a obtener una menor retribución por su tarea pero no una menor carga
de responsabilidad legal cuando hay algún problema a dirimir en la justicia por una
construcción que presente alguna circunstancia litigiosa.
Otra de las situaciones habituales que genera muchos conflictos es la de un arquitecto
contratado por un comitente que solamente quiere los servicios del mismo hasta
obtener el plano registrado por la municipalidad para iniciar la construcción, quedando la
ejecución de la misma en manos de otras personas no profesionales y por sobre todo,
no responsables, ya que ante la ley las responsabilidades civiles y penales siguen
estando en manos del profesional firmante de los planos y encomiendas. Técnicamente
y legalmente esto es tipificado como ¨prestación de firma¨, es una falta de ética clara,
que por sobre todas las cosas las responsabilidades asumidas por el profesional
firmante de ninguna manera pueden ser soslayadas ni delegadas en terceras personas.
Muchos trabajan bajo esta modalidad y no conocen cabalmente los riesgos que se
asumen ni como llevar adelante la relación profesional/comitente.
En general también se reciben en el CPAU muchas denuncias de ética por parte de los
comitentes (son analizadas y no todas prosperan) en contra de la actuación profesional
de los arquitectos. Estas denuncias nunca están relacionadas con cuestiones de diseño,
sino que las mismas principalmente se vinculan con problemas en la ejecución de la
construcción, incumplimiento de contrato, obras mal presupuestadas, falta de
presentación de planos de permiso y consiguiente clausura, abandono de tareas
profesionales (tramites de habilitaciones comerciales en su mayoría), por mencionar los
conflictos más usuales y relevantes.
El Consejo Profesional de Arquitectura y Urbanismo de la Ciudad de Bs. As tiene
actualmente cerca de 11.000 matriculados activos y en el país hay cerca de 50.000
matriculados activos en total con una problemática muy similar a la descripta
precedentemente en general, por lo que en un contexto económico complicado como el
actual y el avance de prácticas profesionales que suelen ser muy perjudiciales para el
colectivo de profesionales de la arquitectura, es imprescindible que las entidades
representativas de los arquitectos como FADEA, la SCA, CPAU y los Colegios de
Arquitectos de todo el país trabajen en conjunto para establecer y reestablecer el
arancel de orden público obligatorio en aquellas jurisdicciones que no esté vigente,
incorporar las nuevas prácticas profesionales no contempladas (en general diferentes
tipos de gestiones administrativas), un honorario mínimo para los concursos públicos y
privados, capacitar y otorgar becas en aquellas cuestiones técnicas del ejercicio
profesional que representan mayores dificultades y generar a través de campañas
publicitarias la necesidad de contratar y consultar arquitectos a la hora de querer
construir, ampliar o refaccionar inmuebles. En estos momentos es fundamental que las
instituciones redoblen sus esfuerzos para colaborar con sus socios y matriculados y
establecer vínculos mucho más sólidos con los mismos.
 

 

Arq. Agustín García Puga

www.garciapuga.com
Titular del estudio "Arq. Agustín García Puga y Asociados"/ Miembro grupo de trabajo "Sports & Leisure" de la Unión Internacional
de Arquitectos/ Vice Presidente IAKS.LAC (International Association for Sports and Leisure Facilities)/ Profesor Adjunto cátedra
Castellano, ”Construcciones 1” – FADU – UBA / Profesor titular de “Codificación y Seguridad 1 y 2” – Universidad de Palermo –
Facultad de Arquitectura/ Vicepresidente 1º en Sociedad Central de Arquitectos/ Presidente de Ejercicio Profesional en la Sociedad Central de Arquitectos/ Premios y reconocimientos en Latino América y Europa/ Consejero Titular del Consejo Profesional de
Arquitectura y Urbanismo (CPAU).
 
 

23 enero 2019 / 1 Comment / by / in
  • Adrian Menichelli says:

    Excelente descripcion de nuestra profesion y su contexto.
    La falta de claridad surge tambien de los propios estudios, donde nunca es claro el rol de cada dibujante o diseñador. No hay escalafon claro que determine quien hace que y que responsabilidades implica cada rol. Si no esta claro dentro del estudio . . . . como se puede comprender desde afuera.
    Adrian Menichelli

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